Suelen decir que el norte con el sur no se llevan bien. Nunca he sabido muy bien en qué se basan para dar justificación a este argumento. Y sinceramente, tampoco me importa mucho esa supuesta “incompatibilidad”. Sí que el norte es más frío, también el carácter puede ser más serio, quizá otro ritmo. Nací con estos condicionantes. Cuando se dice que se pierde “el norte” es como acusar de perder el sentido y la dirección o estar desorientado. Esta expresión es un tanto irreal porque perder “el norte”, se pierde de norte a sur y de este a oeste.
A mí me pasa al revés, yo siempre miro al sur no sé si porque estoy en el norte o porque necesito explorar otros países, otras culturas u otras costumbres. Aunque cierto es que el viento del sur a los del norte nos atosiga bastante.
En estos dos años donde prácticamente sólo ha existido la pandemia, la vacunación, el pasaporte y agujas por doquier, he dejado de viajar, pero no de mirar al sur, no en vano la gran mayoría de giras que he realizado en los últimos veintidós años ha sido al sur. A ese sur que no se entendería sin un enriquecedor cruce de culturas que bañan el Mediterráneo, el Atlántico o el Pacífico.
En estos momentos la exposición BURDIÑA ETA ABOTSA (El hierro y la voz) permanece en el Ateneo de Málaga hasta el 25 de febrero.
Me he sentido a gusto allá donde me han llevado mis canciones y desde hace cuatro años mis creaciones de hierro pero debo confesar que Málaga me ha tratado fenomenalmente bien. Málaga y las personas que gestionan el Ateneo. Al margen que al lado del mar todo me sienta bien, si a esto le añadimos la cultura, el arte, la música y la buena organización, no puedo pedir más.
El 25 de febrero regresaré a la capital malagueña para dar un concierto dentro de la programación del MaF, Málaga de Festival. Un concierto que ofreceré en el propio Ateneo donde haré un repaso a la discografía, con un repertorio basado en mis canciones más clásicas y más poéticas, alejadas un tanto del pop que predomina en la mayoría de mis composiciones.
Canciones publicadas en discos como “Botere zalantzakoak” (1987), “Kalapo” (1991), “Noegga, historias y leyendas” (1999), “Fotopoemak” (2003), “Gris” (2006), “Entre cuatro paredes” (2011), “Te necesito” (2013) o “Erotisme” (2014).
Euskera, castellano e italiano se fundirán en un escenario íntimo, sencillo y discreto. No hace falta más para transmitir la poesía, contar historias reales o inventadas, mostrar la desnudez de mis canciones tal y como fueron compuestas, con la principal pretensión de disfrutar con mi trabajo.
El 25 de febrero navegaré por las aguas bravas del Cantábrico hasta el mar Mediterráneo que tantos muertos han arrastrado sus aguas y mi guitarra a modo de txalupa o patera sonará con acordes que regarán las flores para que tanto dolor no se olvide ante la impasibilidad de la crueldad humana.
Pero también hablaré del mes de febrero, de la boina o la txapela, de enfrentarse a los retos continuos de la vida, del amor y el desamor, del destierro, de las crónicas rosas, del “forno” y sus connotaciones eróticas, de los fiascos y espinas, de lo que pudo ser y no fue, de la conciencia, de la pasión o de lo material.
También recordaré a mi querido Mario Ángel Marrodán, poeta universal portugalujo, amigos que fue de sus amigos y enemigo a muerte de sus enemigos al que le dediqué los discos “Fotopoemak” y “Te necesito”, éste grabado en directo con varios artistas invitados entre los que se encontraba la cantante onubense Argentina que interpretó “Febrero” y “Te necesito”.
Hasta pronto Málaga!